28 Sep 2025
Las manifestaciones obligan al Ejecutivo a dar marcha atrás
El gobierno de Timor Oriental se vio obligado a ceder ante la presión pública tras una serie de protestas masivas, principalmente de carácter pacífico, frente al parlamento en la capital, Dili.
La indignación ciudadana se desató por un plan de aproximadamente 4 mill.$ para comprar vehículos SUV para cada uno de los 65 parlamentarios, un gasto que simbolizaba la indulgencia de la élite en un país donde cerca de la mitad de la población vive en situación muy precaria. Los manifestantes lograron que el Parlamento acordara desechar tanto el plan de compra de automóviles como las pensiones vitalicias para los diputados. Esto demuestra la vitalidad democrática del país, pero también expone las tensiones latentes por la pobreza masiva, y el debate sobre el uso prudente de su Fondo Petrolero de aproximadamente 18.000 millones de dólares. El episodio se produce coincidiendo con las protestas juveniles similares que han afectado a la región, incluyendo a Indonesia, Filipinas y Nepal. Se espera que la rápida resolución del conflicto permita consolidar el perfil de Timor Oriental en su camino hacia convertirse en miembro de pleno derecho de la ASEAN el próximo mes.