Restablecimiento de sanciones

Alemania, Francia y Reino Unido presentaron la propuesta al Consejo, después de que Teherán rechazase las tres condiciones planteadas el pasado mes de agosto: retomar las negociaciones con Washington, garantizar la seguridad de los 400 kilos de uranio altamente enriquecido que se calcula tiene en su territorio y permitir el acceso sin restricciones de los inspectores del Organismo Internacional de la Energía Atómica a las instalaciones nucleares de Fordo, Isfahán y Natanz. Las sanciones restablecidas incluyen el embargo de armas y la congelación de activos financieros a empresas y civiles vinculados con el programa nuclear y balístico. Los principales aliados de Irán en el Consejo, China y Rusia, intentaron sin éxito aplazar la reimposición de las medidas punitivas. Ambos países han señalado que no las aplicarán, al considerarlas ilegales. Por su parte, Teherán ha advertido que “si algún país quiere tomar medidas contra Irán, basándose en estas resoluciones ilegales, se enfrentará a una acción recíproca seria”.